Control propio - Proverbios 5
Pastor Iglesia Bíblica Gracia Verdadera
¡Qué mucho nos fascinaría controlar todas las cosas! Algunos de nosotros quisiéramos poseer un control universal como el que aparece en la película “Click”, con el cual el protagonista puede acomodar a su antojo sus propias circunstancias adelantando el tiempo. Por supuesto, eso es solo una gran fantasía.
La realidad es que tenemos el control de muy pocas cosas; ni siquiera de nosotros mismos. Sin embargo, podemos crecer en el área del control y del dominio propio, producto de nuestro nuevo nacimiento, de la morada del Espíritu Santo en nuestro interior, de la Palabra de Dios implantada en nuestros corazones y de la maravillosa gracia de Dios.
Debemos dejar de tratar de controlar la vida de los demás y comenzar a trabajar con la nuestra. De lo contrario, el caos reinará sobre nosotros.
Proverbios 5:23 Morirá por falta de control propio; se perderá a causa de su gran insensatez.
Hoy es un buen día para reflexionar qué áreas y facetas de nuestras vidas están en descontrol. Qué malos hábitos todavía reinan sobre nosotros como temibles faraones que nos esclavizan.
Definitivamente, no hay ninguna condenación para los que estamos en Cristo Jesús, pero eso no significa que es la voluntad de Dios que permanezcamos sin transformación. Toda su Palabra nos muestra que es su deseo que luchemos y nos esforcemos en la gracia para crecer en esa libertad gloriosa de los hijos de Dios.
La ruta más fácil es el descontrol moral, sexual, económico, el abuso de nuestros cuerpos y la rendición a la frivolidad. Esa ruta tiene sus carriles dirigidos hacia la muerte.
El camino más difícil, en ascenso, con caídas, pedregoso y a veces fangoso, es permitir que el conocimiento, la inteligencia y la sabiduría de Dios, transmitidas por Su Palabra y empoderadas por Su Espíritu, nos ayuden a desarrollar el autocontrol que tanto necesitamos.
Oración
Padre Santo, nuestra torre fuerte eres Tú. Con nuestro ser interior anhelamos ser puros y hacer todas las cosas que te agradan. Sin embargo, vemos con horror otra ley que se manifiesta en nuestros miembros y pretende llevarnos cautivos al pecado. Ante tu trono de gracia clamamos a voz en cuello que nos alumbres con tu verdad.
Tu palabra dice ¿con qué limpiará el joven su camino? Y la respuesta es, guardando tu Palabra. Concédenos la gracia de un corazón que se llene de tu conocimiento y sabiduría. Concédenos la gracia de que esta Palabra sea tan firme en nuestro interior que, empoderados por tu Espíritu, podamos desarrollar cada día más el control de nuestras acciones y decisiones.
Queremos agradarte solo Ti y vivir de tal manera que te glorifiquemos en todo lo que hacemos. En el nombre de Cristo Jesús, nuestro Señor. Amén.
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